▲1.1
EN el año segundo del rey Darío en el mes sexto, en el primer día del
mes, fué palabra de Jehová, por mano del profeta Haggeo, á Zorobabel
hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, y á Josué hijo de Josadac, gran
sacerdote, diciendo: 1.2
Jehová de los ejércitos habla así, diciendo: Este pueblo dice: No es
aún venido el tiempo, el tiempo de que la casa de Jehová sea
reedificada. 1.3 Fué
pues palabra de Jehová por mano del profeta Haggeo, diciendo: 1.4 ¿Es
para vosotros tiempo, para vosotros, de morar en vuestras casas
enmaderadas, y esta casa está desierta? 1.5 Pues
así ha dicho Jehová de los ejércitos: Pensad bien sobre vuestros
caminos. 1.6
Sembráis mucho, y encerráis poco; coméis, y no os hartáis; bebéis, y no
os saciáis; os vestís, y no os calentáis; y el que anda á jornal recibe
su jornal en trapo horadado. 1.7 Así ha
dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos. 1.8 Subid
al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella, mi
voluntad, y seré honrado, ha dicho Jehová. 1.9
Buscáis mucho, y halláis poco; y encerráis en casa, y soplo en ello.
¿Por qué? dice Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está
desierta, y cada uno de vosotros corre á su propia casa. 1.10 Por
eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra
detuvo sus frutos. 1.11
Y llamé la sequedad sobre esta tierra, y sobre los montes, y sobre el
trigo, y sobre el vino, y sobre el aceite, y sobre todo lo que la
tierra produce, y sobre los hombres sobre y las bestias, y sobre todo
trabajo de manos. 1.12
Y oyó Zorobabel hijo de Sealtiel, y Josué hijo de Josadac, gran
sacerdote, y todo el demás pueblo, la voz de Jehová su Dios, y las
palabras del porfeta Haggeo, como lo había enviado Jehová el Dios de
ellos; y temió el pueblo delante de Jehová. 1.13
Entonces Haggeo, enviado de Jehová, habló por mandado de Jehová, al
pueblo, diciendo: Yo soy con vosotros, dice Jehová. 1.14
Y despertó Jehová el espíritu de Zorobabel hijo de Sealtiel, gobernador
de Judá, y el espíritu de Josué hijo de Josadac, gran sacerdote, y el
espíritu de todo el resto del pueblo; y vinieron é hicieron obra en la
casa de Jehová de los ejércitos, su Dios. 1.15 En el
día veinte y cuatro del mes sexto, en el segundo año del rey Darío. ▲2.1 EN el mes séptimo, á los
veinte y uno del mes, fué palabra de Jehová por mano del profeta
Haggeo, diciendo: 2.2
Habla ahora á Zorobabel hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, y á Josué
hijo de Josadac, gran sacerdote, y al resto del pueblo, diciendo: 2.3
¿Quién ha quedado entre vosotros que haya visto esta casa en su primera
gloria, y cual ahora la veis? ¿No es ella como nada delante de vuestros
ojos? 2.4 Pues
ahora,
Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también Josué, hijo de
Josadac, gran sacerdote; y cobra ánimo, pueblo todo de la tierra, dice
Jehová, y obrad: porque yo soy con vosotros, dice Jehová de los
ejércitos. 2.5 Según
el pacto que concerté con vosotros a vuestra salida de Egipto, así mi
espíritu estará en medio de vosotros: no temáis. 2.6 Porque
así dice Jehová de los ejércitos: De aquí á poco aun haré yo temblar
los cielos y la tierra, y la mar y la seca: 2.7
Y haré temblar á todas las gentes, y vendrá el Deseado de todas las
gentes; y henchiré esta casa de gloria, ha dicho Jehová de los
ejércitos. 2.8 Mía es
la plata, y mío el oro, dice Jehová de los ejércitos. 2.9
La gloria de aquesta casa postrera será mayor que la de la primera, ha
dicho Jehová de los ejércitos; y daré paz en este lugar, dice Jehová de
los ejércitos. 2.10 A
veinticuatro del noveno mes, en el segundo año de Darío, fué palabra de
Jehová por mano del profeta Haggeo, diciendo: 2.11 Así ha
dicho Jehová de los ejércitos: Pregunta ahora á los sacerdotes acerca
de la ley, diciendo: 2.12
Si llevare alguno las carnes sagradas en la falda de su ropa, y con el
vuelo de ella tocare el pan, ó la vianda, ó el vino, ó el aceite, ú
otra cualquier comida, ¿será santificado? Y respondieron los
sacerdotes, y dijeron: No. 2.13
Y dijo Haggeo: Si un inmundo á causa de cuerpo muerto tocare alguna
cosa de éstas, ¿será inmunda? Y respondieron los sacerdotes, y dijeron:
Inmunda será. 2.14 Y
respondió Haggeo y dijo: Así es este pueblo, y esta gente, delante de
mí, dice Jehová; y asimismo toda obra de sus manos; y todo lo que aquí
ofrecen es inmundo. 2.15 Ahora
pues, poned vuestro corazón desde este día en adelante, antes que
pusiesen piedra sobre piedra en el templo de Jehová, 2.16
Antes que fuesen estas cosas, venían al montón de veinte hanegas, y
había diez; venían al lagar para sacar cincuenta cántaros del lagar, y
había veinte. 2.17 Os
herí con viento solano, y con tizoncillo, y con granizo en toda obra de
vuestras manos; mas no os convertisteis á mí, dice Jehová. 2.18
Pues poned ahora vuestro corazón desde este día en adelante, desde el
día veinticuatro del noveno mes, desde el día que se echó el cimiento
al templo de Jehová; poned vuestro corazón. 2.19
¿Aun no está la simiente en el granero? ni la vid, ni la higuera, ni el
granado, ni el árbol de la oliva ha todavía florecido: mas desde
aqueste día daré bendición. 2.20 Y fué
segunda vez palabra de Jehová á Haggeo, á los veinticuatro del mismo
mes, diciendo: 2.21 Habla
á Zorobabel, gobernador de Judá, diciendo: Yo haré temblar los cielos y
la tierra; 2.22
Y trastornaré el trono de los reinos, y destruiré la fuerza del reino
de las gentes; y trastornaré el carro, y los que en él suben; y vendrán
abajo los caballos, y los que en ellos montan, cada cual por la espada
de su hermano. 2.23
En aquel día, dice Jehová de los ejércitos, te tomaré, oh Zorobabel,
hijo de Sealtiel, siervo mío, dice Jehová, y ponerte he como anillo de
sellar: porque yo te escogí, dice Jehová de los ejércitos.